jueves, 25 de enero de 2024

LEY DE PESCA: DE LA LEY “LONGUEIRA” A LA “LEY ZALAQUETT”.

 

Globalismo y Naturaleza: N°3- 2024

LEY DE PESCA: DE LA LEY “LONGUEIRA” A LA “LEY ZALAQUETT”.

Por Héctor Kol

Para sinrepresassinsalmoneras.blogspot.com

Enero de 2024.

 

La Ley de Pesca y Acuicultura vigente, nacida en 2012 bajo una corrupción transversal del Parlamento chileno, se conoce como “Ley Longueira” dado el rol fundamental que, en su elaboración y negociación, cumplió el entonces Ministro de Economía, Pablo Longueira, que transitó por todo el aparato parlamentario durante varios años para finalmente arribar, en el Gobierno de Sebastián Piñera I (2010- 2014) al cargo  de Ministro de Economía y hacerse cargo de la extensión de una Ley “Corta” de Pesca y Acuicultura que él mismo había elaborado en el año 2002, cuando era Diputado de la Derecha más Pinochetista de entonces: la Unión Demócrata Independiente, UDI.

En el tormentoso año 2002, el entonces Presidente de la República, Ricardo Lagos Escobar, se enfrentaba a una posibilidad cierta de ser destituido por casos de corrupción detectados durante su gestión como Ministro de Obras Públicas en el Gobierno que lo había precedido, particularmente el caso de los llamados “sobresueldos” o “Caso MOP-Gate”, consistente en dineros no declarados que se entregaban de manera subrepticia a la plana mayor del Ministerio encabezado por Lagos (y siendo él mismo uno de los beneficiarios) para evitar, según se justificara entonces, que los expertos del Ministerio migraran hacia el sector privado por mejores sueldos [1].

Pablo Longueira, entonces Diputado de la UDI, personalmente acudió al despacho presidencial para apoyar al Presidente cuestionado e impune hasta hoy. El apoyo no fue gratuito ni una mera declaración de buenas intenciones, sino que, como parte del “apoyo al Presidente”, el Diputado le entregó a Lagos un “Plan de Modernización del Estado”, donde estaba una nueva Ley de Pesca y Acuicultura… La primera Ley Longueira o “Ley Corta”, que perduró por diez años.

Así se salvó el Gobierno que, hasta ahora, era el más corrupto que había tenido Chile desde el fin de la Dictadura Militar, aprobando un paquete de medidas elaboradas fuera del Gobierno y entre ellas, una nueva Ley de Pesca, que por primera vez dejó a los pescadores artesanales SIN UN SOLO PESCADO, pues los peces en el mar, a partir de entonces, pertenecen A LA LANCHA QUE LOS CAPTURA y en consecuencia, al dueño de esa lancha: al “armador”, que también ocupa todos los cargos sindicales y federativos de la pesca artesanal… para que nada cambie. El pescador artesanal sin lancha, es sólo mano de obra… y la lancha una PYME…



Pablo Longueira fue posteriormente Senador. Ocupó otros varios años un escaño en el Parlamento chileno y sólo salió de allí cuando se cumplió el plazo de duración de la Ley “Corta” de Pesca conque salvó al Gobierno de Lagos, consagrando, de paso, un hecho inédito en la política mundial: un país democrático donde NO HAY OPOSICIÓN POLÍTICA, no importa el Gobierno del que se trate. Al final del día (y de la vida) “todos somos calaveras” … A Pablo Longueira y a Ricardo Lagos les debemos eso.

Desde el Senado, Pablo Longueira saltó a la cartera de Economía para hacerse cargo, obviamente, de la extensión de su primera Ley. Su visión estratégica se mantuvo durante una década completa y su visión táctica se amplió, sumando en el negociado a toda la pesca artesanal reunida en dos Confederaciones; la CONFEPACH que habían inventado los industriales pesqueros para conseguir el apoyo “artesanal” a la Ley “Corta” y la CONAPACH, opositora de la Ley Corta, pero que “obtuvo muy buenos resultados” cuando apoyó la extensión de esa Ley por otros 20 años…



Además, Longueira sumó el apoyo del Ambientalismo VIP acuático, de aquellos “defensores del mar” con yate propio, que, en mi presencia y cuando me desempeñaba como asesor externo de Fundación Pumalín, anunciaron su apoyo a la actual Ley Longueira durante una reunión de ONGs celebrada en el año 2011 en el borde costero de Santiago, ante mi total perplejidad.

Hasta hoy, el Ambientalismo VIP defiende esa Ley “porque contenía características de sustentabilidad”, pero que ha tenido las consecuencias que se verán más adelante para los recursos pesqueros y para la soberanía alimentaria nacional. La única “sustentabilidad” de esa Ley fue la del flujo de recursos financieros y especulativos que domina a esa actividad, tal como lo señalé en esa reunión de Santiago más de diez años atrás, de manera infructuosa. 

El ambientalismo VIP, con mucho, es PARTE de los problemas del sector pesquero, PARTE de las amenazas a la Soberanía Alimentaria de los chilenos y PARTE de las amenazas a la Soberanía Nacional,  como ya se adelantó en el primer número de esta serie “Globalismo y Naturaleza”.

Porque, como cada uno de los partidos políticos de hoy, las empresas ambientalistas tiene su propia agenda: la agenda del Globalismo y el interés nacional y soberano NO ES PARTE de esa agenda, sino todo lo contrario…



Ya en el año 2004, Cosme Caracciolo, dirigente histórico de la pesca artesanal y entonces Presidente de la CONAPACH, me había enseñado que el sector pesquero chileno es el más corrupto del mundo y que esa corrupción era administrada por SUBPESCA, la Subsecretaría de Pesca (y Acuicultura, hasta ahora) que se encuentra alojada en el Ministerio de Economía, adonde llegó Pablo Longueira durante el primer Gobierno de Sebastián Piñera.

Nunca olvidé esa lección, porque sigue vigente y la he podido comprobar en los 17 años que llevó de visita en la zona austral, batallando por ése mar que tranquilos nos roban y destruyen. Y en el actual Gobierno, que en materias de corrupción ha superado con largueza la corrupción del Gobierno de Lagos, esa lección que aprendí de Caracciolo vuelve a renovarse.

En los “cheese and wine” ofrecidos en su propio departamento por otro ex Diputado UDI, JOSÉ ZALAQUETT, descubiertos por la prensa y donde se negociaron nuevas leyes y cambios en Reglamentos ya existentes (y probablemente el espurio acuerdo del litio con SOQUIMICH, SQM) también la nueva Ley de Pesca y la futura Ley de Acuicultura se habrían negociado en una de las tradicionales “cocinas” de la política chilena, como aquella celebrada en la CUT en noviembre de 2019 y que dio origen al actual Gobierno.

Al menos SEIS Ministros de carteras que elaboran propuestas legislativas relativas a trabajo, pensiones, medioambiente y recursos naturales (además de política exterior y seguridad, que aún no se conocen)  asistieron a los picadillos ofrecidos por un negociador intermediario de los empresarios, entre ellos, la Ministra de Medioambiente y el Ministro de Economía, este último a cargo de SUBPESCA y del SERNAPESCA, con su única lancha para “fiscalizar” la actividad pesquera y acuícola.

 


A la izquierda de la foto, José Zalaquett, ex Diputado UDI y cocinero; a la derecha, los comensales,

Maisa Rojas, Ministra del Medioambiente y Nicolás Grau, Ministro de Economía.

 

No hay audios ni documentos disponibles, pero la prensa ha destacado que para tales “picadillos” los asistentes debían cancelar dos millones de pesos (unos US$ 1.800) para sentarse a la mesa en los distintos “talk-shows” ministeriales que se conocen. Sólo la Ministra del Medioambiente se presentó a tres de estos costosos espectáculos, según ella misma ha declarado [2].

Yo dudo que se haya pagado tanto dinero por una Ley de Pesca como la que se anunció y presentó en diciembre de 2023. Y si así se hizo, fue dinero perdido, porque lo presentado, en materias de Pesca, es otro cantinfleo más del Gobierno que ha hecho lo que parecía imposible: superar en corrupción al Gobierno de Lagos.

EL CANTINFLEO

 El Mensaje Presidencial 280-371, fechado 21 de diciembre de 2023, señala que con este se inicia un Proyecto de Ley de Nueva Ley General de Pesca.


Ya no se trata de una nueva Ley General de “Pesca y Acuicultura” (LGPA) porque, en alguno de los picadillos y talk-shows celebrados en el domicilio de Zalaquett, se debe haber llegado a la conclusión de que se pesca en un mar distinto a aquel donde se hace acuicultura, o bien que en las llamadas AAA (Áreas Aptas para la Acuicultura) no hay peces, ni bancos naturales de moluscos o crustáceos, o que el agua es más húmeda, quizás más salada…

 SON DISTINTOS, definitivamente, los mares donde se hace una u otra actividad y por ello habrá una Ley para todo el Mar Territorial, el oceánico y las aguas interiores (canales, archipiélagos y fiordos) y otra Ley para las AAA. Simplemente, una idea genial nacida del poco “chesee” pero mucho “wine”, probablemente.

 El Mensaje Presidencial con que se inicia esta Ley de Pesca, que estará vigente en el Mar de la República donde sólo se pesca, es un documento de 212 páginas y de las que sólo sirven las primeras 13 páginas, pues en ellas no sólo se explica el verdadero objetivo de esta Ley, sino que además se entregan estadísticas simples que demuestran que todo el resto del documento (199 páginas) lo redactó… Cantinflas.

 En sus páginas 1 y 2, en el Capítulo I “ANTECEDENTES”, el Mensaje Presidencial señala, como declaración de principios, lo siguiente (subrayados nuestros):

 “…La última reforma de gran envergadura a la LGPA y el sector pesquero, tuvo lugar hace más de 10 años. En esta época no se tenía todavía consciencia ni consenso social suficiente en torno a las severas consecuencias de la crisis climática, de las cuales el océano, sus recursos hidrobiológicos y la actividad pesquera no pueden sustraerse.

 

Asimismo, es relevante que este nuevo cuerpo normativo sea legislado de cara a la ciudadanía y en condiciones de plena transparencia, a diferencia de lo ocurrido durante la elaboración de la ley N° 20.657, que modificó la Ley General de Pesca y Acuicultura vigente (LGPA)…”.

 

Así, en esta suerte de marco doctrinario, aparece la primera pista acerca de la verdadera razón fundante de esta nueva Ley: tener un instrumento pesquero inserto en la visión apocalíptica de las empresas fabricantes de tecnologías “renovables” que promueven sus productos a través de la ONU y que habría contado con el suficiente  “consenso social” de la Sociedad reunida en torno a los “cheese and wine” en el domicilio de Zalaquett.

 

Pero más aún, señala como RELEVANTE que esta nueva ley, que será aplicada allí donde se pesca, “sea legislado de cara a la ciudadanía y en condiciones de PLENA TRANSPARENCIA”

 

Sin comentarios…

 

Más adelante, en sus páginas 4 y 5 y bajo el literal 2.- “Nuevos desafíos en contexto de emergencia climática”, el Mensaje Presidencial profundiza en la sumisión a la visión apocalíptica ya señalada que justifica a esta nueva Ley de Pesca (subrayados nuestros):

 

 2. Nuevos desafíos en contexto de emergencia climática

 “…El Estado tiene el deber ineludible de proteger y custodiar la biodiversidad marina, adoptando de forma oportuna las medidas de conservación y uso sustentable de las especies hidrobiológicas dentro de la jurisdicción nacional y en alta mar, cooperando internacionalmente para alcanzar tales objetivos.

 Para ello, nuestra administración se encuentra en vías de implementación de reformas legislativas sustanciales, que forman parte del esfuerzo por hacer frente a los desafíos de la emergencia climática en curso, como la ley N° 21.455, Ley Marco de Cambio Climático o la ley N° 21.600, que creó el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas y el Sistema Nacional de Áreas Protegidas…”

 

Y termina tal presentación con la verborrea Globalista y alienada de siempre, sólo para hacer más “transparente” lo que se pretende:

 

“… En consonancia con este escenario de modernización normativa, esta propuesta propone reforzar nuestra gestión pesquera resiliente y sostenible, con la sinergia entre decisiones científicamente informadas y un enfoque holístico y adaptativo…”

 

Así de “transparente”, claro, conciso y explicativo es el contexto ideológico que, entre quesos y vinos, se expresó en la redacción de esta apología a los objetivos Globalistas de la ONU.

 

Y para que no quedaran dudas acerca de lo que en verdad esta Ley pretende, se ratifica el objetivo real de esta Ley en la página 6 del Mensaje presidencial, bajo el literal 3.- “Antecedentes en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas” (subrayados nuestros):

 

3. Antecedentes en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas

 

“A nivel internacional, esta propuesta también encuentra como antecedente relevante los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas de 2015. Así, el n°14 de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los ODS de las Naciones Unidas establece como objetivo el “Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible”.

 

Al adoptar estos objetivos, los Estados, entre ellos Chile, se comprometieron a movilizar los medios necesarios para su implementación. El progreso en los ODS, a su vez, coadyuva a la acción climática para reducir el cambio futuro de los ecosistemas de los océanos, y también las respuestas de adaptación a cambios inevitables”.

 

Punto. Más claro echarle agua…

 

Ése (y no otro) es el objetivo único y real de esta nueva Ley de Pesca que se propone: cumplir los lineamientos Globalistas de la ONU, que respecto al mar y su “protección” se lanzaron en junio de 2022 en… Washington D.C. y donde Boric acudió a sólo tres meses de haber asumido la Presidencia de la República [3]. La llamada “Política Turquesa” tampoco es un invento de este Gobierno, sino otro “encargo”.

 

 Como demostraremos, el resto del Mensaje Presidencial es inservible, porque se basa en una ignorancia casi absoluta respecto de la condición en que se encuentran los recursos pesqueros, su biomasa, estado de conservación y un largo etcétera que hace IMPRACTICABLE esta nueva ley que se propone.

 

Los presuntos objetivos de sustentabilidad de los recursos pesqueros, responsabilidad de quienes los explotan y cuidado de los ecosistemas, son meras especulaciones contenidas en esta nueva Ley, puesto que los mecanismos de explotación, de distribución de cuotas globales y regionales, de definiciones de artes de pesca, aparejos y hasta la existencia de una “pesca artesanal” que, en la zona austral al menos, ya no existe, no disponen de información que los sustente.

 

En otras palabras, los “objetivos” de sustentabilidad que se anuncian para camuflar la inserción de esta Ley en las políticas Globalistas, se describen en un ámbito de ignorancia casi total acerca de lo que hay y de lo que no hay en el Mar Chileno, pues en el mismo Mensaje Presidencial que se comenta se entregan   estadísticas que demuestran que esta Ley, como cuerpo normativo para la regulación de la actividad pesquera, es un mero “Cantinfleo”.

 

En efecto, en las páginas 11 y 12 del Mensaje Presidencial que se comenta, bajo el literal 2 “Estado de conservación y administración de nuestras especies y recursos hidrobiológicosse señala lo siguiente (subrayados nuestros”:

 

“… Al año 2022, 174 especies han estado sujetas, en diferentes grados de intensidad, a explotación pesquera, ya sea por el sector pesquero artesanal o por el sector pesquero industrial. La captura de estas especies es el resultado de operaciones dirigidas en calidad de especie objetivo o como resultado de la interacción del arte o aparejo de pesca con otras especies, que son registradas en calidad de fauna acompañante.

 

No obstante el número de recursos hidrobiológicos que reporta desembarque, la cantidad de pesquerías reconocidas formalmente como tales es más reducida.

 

El estado de situación de una pesquería, asociado al estado de conservación del recurso, se evalúa sobre la base de puntos referenciales que se denominan puntos biológicos de referencia. Estos puntos corresponden a una métrica asociada a los niveles de biomasa actuales respecto del nivel deseado, así como también respecto al nivel de esfuerzo aplicado (mortalidad por pesca) respecto de un nivel deseado o un nivel límite.

 

Actualmente se reconocen 45 unidades de pesquería nacionales, de las cuales 24 tienen establecido sus puntos biológicos de referencia, ya sea en términos específicos o a través de indicadores proxis o sustitutos y que se actualizan anualmente. Estas unidades corresponden principalmente a pesquerías de peces y de crustáceos demersales”.

 

Es decir, al año 2022 se pescaron ejemplares de 174 especies distintas, de las que sólo 45 son “pesquerías” formales y donde sólo 24 de ellas tuvieron “puntos biológicos de referencia” actualizados que permitían establecer si el nivel de explotación amenazaba o no el estado de conservación de tales pesquerías. Sólo 24 de 174 especies capturadas…

 

De las restantes 150 especies capturadas y desembarcadas, el estado de conservación de estas no se podía determinar porque no existen… NO EXISTEN…los “puntos biológicos de referencia” que permitirían detectar una explotación amenazante o no para la conservación de las especies involucradas.

 

Así, al año 2022, sólo se podía conocer de los efectos de las capturas o desembarques declarados sobre el estado de conservación del 13,8% de las especies capturadas en ese año, un desconocimiento insólito que probablemente se arrastra por años, dada la inoperancia que se le reconoce a los servicios públicos reguladores y fiscalizadores de la actividad pesquera. Esta ausencia de información es otra demostración de ello.


De las 21 especies restantes de estas 45 especies declaradas formalmente “pesquerías”, no se tienen   datos actualizados que permita establecer sus grados de conservación, aunque en el Mensaje Presidencial se asume que se encuentran “en plena explotación”, esto es, en un nivel de explotación permisible para que se conserven como pesquerías:

 

“Adicionalmente, existen cuatro unidades de pesquería cuyo estatus no se ha actualizado, ya sea porque se encuentran en veda extractiva o debido a que no hay actividad dirigida a éstos como pesca objetivo. Para dicha actualización se requiere de mayor información científica para fundamentar eventuales cambios de estatus.

 

Por otra parte, existen 17 unidades de pesquería sin punto biológico de referencia establecido, principalmente correspondientes a recursos bentónicos. Sin embargo, en atención al comportamiento de indicadores de la pesquería (i.e. niveles de captura, rendimientos de pesca, estructura de tamaño de las capturas, talla promedio, entre otras), así como al número de participantes de la misma, se asume que estas pesquerías se encuentran en estado de plena explotación, conforme al principio precautorio”.

 

 

En SUBPESCA y en IFOP (Instituto de Fomento Pesquero) entonces, son capaces de ADIVINAR el estado de conservación de DIECISIETE ESPECIES que se capturan con sólo saber cuánto se desembarca de cada una de ellas. Y además, son optimistas, pues “asumen” que todavía queda algo de esa pesquería…

 

Ni Yolanda Sultana sería capaz de tanto.

 

Como si esto no fuera suficiente, en la página 13 del Mensaje Presidencial, se señala lo siguiente:

 

“Sobre la base de lo anterior y de acuerdo con lo informado en marzo del presente año, respecto de las 24 unidades de pesquería que cuentan con estado de situación actualizado, 17% (4) se encuentra subexplotadas, 33% (8) en estado de plena explotación, 33% (8) pesquerías en estado sobre explotación y 17% (4) en condición de agotada. Según esta información, la mitad de estas pesquerías se encuentra en niveles saludables”.

 

En consecuencia, de las 24 pesquerías con “puntos de referencia biológicos” establecidos y actualizados,  LA MITAD YA HA DESAPARECIDO, estando en condiciones de “sobre-explotación” o “agotada”. Pero el Mensaje Presidencial es optimista: la mitad está “saludable”, aunque el “Mensajero”, con aptitudes matemáticas de sobra conocidas, no es capaz de darse cuenta de que “lo saludable” corresponde sólo al 7% de todas las especies que se capturaron en el año 2022, mientras que otro 7% ya desapareció (sobre-explotada o agotada) y que del 86% restante de las especies capturadas a 2022… NADA SE SABE.

 

Pablo Muñoz, un hombre dedicado a estudiar las estadísticas pesqueras tan desastrosas como las que el Mensaje Presidencial presenta, me señaló alguna vez: “SUBPESCA es el único Banco en el mundo al que se le desaparecen, todos los años, la mitad de los fondos depositados… pero sigue funcionando”.

 

Estamos en Chile, Pablo, el país de los adivinos y los “adivinos” actuales nos presentan una Ley que sólo es aplicable para EL 7% DE LAS ESPECIES QUE ACTUALMENTE SE CAPTURAN.

 

Así, un Gobierno “Cantinflero” y “Adivino” presenta otro proyecto inútil, ya no con “letra chica”, sino con “números chicos”, casi diminutos e imperceptibles en su mayoría, para regular una actividad pesquera de efectos DESCONOCIDOS sobre la mayoría de las especies que son capturadas y de las que nada se sabe.

  

Entonces, ¿cómo se establecen las cuotas globales de pesca?, ¿en base a qué se distribuyen las cuotas de pesca para la pesca industrial y las cuotas que la pesca artesanal recibe pero que le transfiere a la pesca industrial?, ¿cómo se establecen las cuotas destinadas a “consumo humano?... ADIVINEN…

 

Al fin y al cabo, no importa que la Ley no sirva, que se base en la imaginación de sus redactores y en la casi total ignorancia de lo que hay o no hay en el mar territorial.

 

Lo que se necesitaba era una Ley que DIJERA QUE SE INSERTA EN LA AGENDA 2030 DE LA ONU. Nada más, porque es parte de la propaganda, de la estrategia de sembrar el pánico para vender un producto salvador, otro panfleto como los que se tiraban en los años ’60 del siglo pasado sobre el “Efecto Green- House” (Efecto Invernadero) y que se imprimían en talleres similares a los de las Universidades Suecas de hoy, que imprimen  Diplomas para Doctores Honoris Causa en Teología, para las y los profetas del Cambio Climático,  porque ya es Religión [4].

 

Pero por sobre todo, porque es la propaganda que justifica la neo-colonización “verde” de mares y territorios y el despojo de la Soberanía Alimentaria de los pueblos que, como en nuestro caso, radica principalmente en el mar: en Chile hay cuatro grandes “Parques Marinos” que suman 85 MILLONES DE HECTÁREAS DE MAR… DONDE NO SE PUEDE PESCAR.

 

 

Con esta Ley, entonces, basta y sobra para que el Gobierno “Cantinflero” y Globalista, nacido también en una “cocina”, cumpla con la tarea encomendada.

 

 

Héctor Kol

Patagonia Chilena

Enero de 2024.

 

 

 

 

 



[1] https://www.latercera.com/la-tercera-pm/noticia/2282-millones-cde-demanda-a-condenados-por-caso-mop-gate-y-exige-el-pago-de-multas-20-anos-despues/EBWVBCV4KBC5JJHD7YM7F32Q7U/

[2] https://www.eldinamo.cl/politica/2024/01/18/ministra-maisa-rojas-revelo-nueva-reunion-en-casa-de-zalaquett-estos-fueron-los-empresarios-que-asistieron/