domingo, 25 de septiembre de 2011

Futuro Subsecretario de Acuicultura



LOS “CHARANGO DE GATO”

Por Héctor Kol
Para: sinrepresassinsalmoneras.blogspot.com
Patagonia Chilena, Septiembre del 2011

De vez en cuando, según lo ocupados que estén en la Subsecretaría de Pesca (SUBPESCA) o en la agencia publicitaria Salmon-Chile, resurge la propuesta para la creación de una Subsecretaría de Acuicultura, especializada en la actividad acuícola y que sea capaz de generar las regulaciones que precisa la explotación irracional del mar Chileno.

Pero si la Subsecretaría de Pesca ha sido CERO aporte para la sustentabilidad de los recursos pesqueros y para la protección del medio marino, no se explica qué es lo que buscan “especializar” o “precisar” a través de una Subsecretaría destinada, a priori, para los salmoneros. ¿Les quedará algo por depredar, contaminar, usar como basurero submarino o moler y secar para alimentar salmones? ¿Van a inventar nuevos subsidios estatales, o investigaciones FONDEF o créditos CORFO “no-retornables” para seguir dilapidando los fondos públicos?

Es una incógnita absoluta.

Sin embargo, creo necesario hacer mi propia propuesta alternativa a esta repetida “nueva necesidad” del último mito chilote.

Mi propuesta a una Subsecretaría de Acuicultura es la creación de una Subsecretaría Psiquiátrica, porque acá, viendo lo que pasa con el Mar chileno sin que se aparezca un solo encapuchado o un jipi para impedirlo, estamos todos locos.

En efecto, la Subsecretaría Psiquiátrica ordenaría cada una de las acciones dementes en las que se basó el “éxito” perdido de la industria acuícola en Chile, desde la patente acuícola de $ 20 (veinte pesos chilenos) al año que pagan los salmoneros por METRO CUADRADO DE AGUA , hasta la entrega de sardinas (que hace la pesca artesanal, a $ 37 el kilo) para la fabricación de alimentos para salmones. Es obvio que Chile se merece una Subsecretaría que gestione tamañas ridiculeces.

La nueva repartición estaría departamentalizada para aumentar su eficiencia en la liquidación del Mar Austral, siguiendo la regla de oro del aparato estatal capitalista neo-liberal chileno: “si vas a hacerlo MAL…debes hacerlo rápido”, donde el Puente Loncomilla de Ricardo Lagos compite con el Hospital de Talca como máximas expresiones de cómo se deben hacer las cosas… para tener que hacerlas de nuevo.

Vaya aquí mi propuesta.

La Subsecretaría Psiquiátrica

La conducción de tan necesaria repartición ya tiene asegurada a su máxima autoridad: el actual Ministro de Economía, del que ya dependen SERNAPESCA (el servicio “geométricamente armónico, que fiscaliza que cada año el Mar Austral esté PEOR que el año anterior) y también SUBPESCA, de funciones desconocidas…

Una Subsecretaría como la que propongo NECESITA, incluso por razones metafísicas, a un superior jerárquico como el actual Ministro: sería im-pre-sen-ta-ble que una Subsecretaría Psiquiátrica no estuviera comandada por un político que, además de ser de la UDI, habla con los muertos. ¿Qué pensaría de nosotros la OCDE si el actual Ministro de Economía no dirigiera a este nuevo servicio estatal? Probablemente, nos obligarían a comer los salmones que les exportamos…

Resuelto el tema de la conducción (como diría Ricardo Casas, de la FETRAINPES) al menos 4 Departamentos debiera tener la Subsecretaría Psiquiátrica, para reunir a todos los genios que mantienen convencidos a los chilenos (o por lo menos, a AQUA.cl) de que la industria salmonera existe.

A) Departamento Ritalín

Agruparía a los asesores y técnicos de las empresas salmoneras que se arrancan de cuanto foro y debate se organice en universidades e institutos… a menos que lo organicen ellos mismos, el Intendente de la Región de Los Lagos o el ECO-Senador Horvath. Ciertamente, a estos foros y debates, donde se paga entrada, van sólo ellos, pero se conforman con mantener vigente el lema de tales encuentros: "no somos muchos…pero somos sushi…."

También tendrían allí cabida los miembros de las Consultoras Ambientales, con crisis de pánico cada vez que se les echa a perder la fotocopiadora justo cuando tienen que entregar 50 Declaraciones de Impacto Ambiental para TRUSAL o para CULTIVOS MARINOS CHILOÉ, donde bajo juramento señalan que van a respetar las normas ambientales en centros de engorda de salmones que se empiezan a construir en el año 2010 y se terminan de construir en el año 2001… Seguramente, de allí sale el cotizado salmón “Einstein”, donde cada filete incluye un manual sobre la teoría de la relatividad y su relación con la Industria Salmonera chilena.

B) Departamento Creativo

Por lejos, debiera tener los mejores sueldos para sus integrantes. La capacidad creadora que se reuniría allí superaría a la de los tramoyas del Cirque Du Soleil o la de los guionistas de la película “Obama: Embajador de la Paz”.

Ningún artificio publicitario escapó al ojo de los encargados salmoneros para convertir a esta industria “trucha” en un boom exportador. Inventaron tres veces el mismo robot para limpiar redes salmoneras en las narices mismas de CONICYT, FONDECYT y FONDEF, que les financiaron los respectivos proyectos las tres veces.

Inventaron las balsas-jaulas de cobre y hasta el virus ISA “a-sintomático”, sin olvidar los bancos-naturales de productos bentónicos, que sólo son tales hasta los 30 metros de profundidad…más abajo de eso, el “chorito” deja de ser “chorito”…

También inventaron los estudios de capacidad de carga de los sistemas acuáticos a contaminar ¡20 AÑOS DESPUÉS DE QUE EMPEZARON A CONTAMINARLOS!.. Inventaron a un servicio fiscalizador que no tenía lanchas propias para fiscalizarlos… y ahora son fiscalizados mediante una encuesta que llenan los jefes de los centros de engorda de salmones…. Genial.

Convencieron al gobierno de la presidenta socialista Bachelet que PRIVATIZAR el Mar Austral era “bueno” para los intereses nacionales, es decir, era “bueno” para pagarle las deudas que aún mantienen con la banca privada. Despidieron miles de trabajadores, desarticularon a todos los sindicatos y Federaciones de Trabajadores… y después de eso…resucitaron, pero SIN Sindicatos, sin Federaciones y sin virus ISA sintomático. Doblemente genial.

A cargo de este Departamento debe estar Rodrigo Infante, ex gerente general de Salmon-Chile, que en el documental “Las Jaulas en el Mar”, de CEIBO Producciones, hasta le cocinó el salmón a un imaginario habitante de Estocolmo que tenía el suficiente valor (o la suficiente ignorancia) de tragarse el salmón producido en Chile.

El asesor legal de este Departamento debiera ser cierto Fiscal del Ministerio Público (de cuyo nombre prefiero no acordarme) experto en sal-montajes, que desapareció de las audiencias de un juicio tan falso como un salmón orgánico.

C) Departamento de Relaciones Humanas

Gerenciado por Camilo El Tribuno, sin duda. El Presidente del Partido Socialista (o lo que queda de este) es amigo y “compañero” de todos, el que tiene más seguidores en Twitter y es alma de todas las fiestas y “primarias”. Junto al Director Zonal de Pesca, son una dupla de temer, que contagia simpatía…Los Starsky y Hutch de la salmonicultura chilena.

A Camilo no se le conoce enemigo alguno y aunque trató de “chupasangre” a los empresarios salmoneros en una tarde de bajo biorritmo, recapacitó en cosa de días y encabezó la campaña para Privatizar el mar chileno. El hombre sabe cuando está equivocado…

Como mano “derecha” de Camilo (o “izquierda”, a él le da lo mismo, porque es tolerante) debiera estar la encargada de Recursos Humanos de una conocida empresa salmonera Noruega, única sobreviviente de la ópera-rock “Yo sólo quiero ser de Marine Harvest” y que despidió a todo los demás actores porque bailaban mejor que ella.

Este departamento administraría lo que es infaltable dentro de una Subsecretaría Psiquiátrica: el electro-shock, alimentado por la energía a producir por Hidroaysén o algún otro proyecto energético tan “sustentable” como la salmonicultura intensiva.

Las barandas metálicas en desuso, que las salmoneras tiran al fondo del mar, serían recuperadas para la construcción de “parrillas” tipo CNI o de su sucesora, la ANI, que se usarían para interrogar al personal de esta Subsecretaría en caso de que se extravíe algún subsidio estatal o se pierda algún concurso FONDEF.

Será función de este Departamento, además, la entrega del CHARANGO DE GATO AWARD, destinado a la empresa o funcionario que siga asegurando que Chile es apto para cultivar salmones, que invente un nuevo robot para limpiar redes salmoneras o que consiga un nuevo crédito bancario. El evento sería animado por la Orquesta “Bancada Salmonera Sound”, desafinada como siempre y dirigida por el actual Subsecretario de Pesca, un ex integrante de la Orquesta.

D) Departamento de Estadísticas

Obligadamente se precisaría del reclutamiento de más de un Premio Nobel de Economía y/o Matemáticas. Ni César Barros fue capaz de explicar por qué una Industria “exitosa” declaraba sólo pérdidas cuando los trabajadores entraban a negociaciones colectivas o pedían un aumento de sueldo. Evidentemente, se necesitan refuerzos.

George W. Bush no parece ser el indicado para ocupar un cargo, pues metió a Estados Unidos en cuanta guerra necesitaron las petroleras, pero bajó los impuestos, dejando a esta Federación Bancaria fuera de las naciones AAA, es decir, fuera de las Áreas Aptas para la Acuicultura. Un error imperdonable.




Pero existen alternativas: cualquiera de los Ministros de Hacienda que tuvo la Concertación sirve para este Departamento de manipulación de datos.

Y bajo el lema “Tú, que todo lo sabes… y lo que no... lo inventas”, el Departamento de Estadísticas calculará de dónde van a sacar la pesca silvestre para alimentar el millón de toneladas de salmones que piensan producir en la Región de Aysén, es decir, las entre 5 y 10 millones de toneladas de pesca silvestre que se necesitarían para la fabricación de los alimentos que exigirá tan espectacular y patagona producción.

Probablemente, en respuesta de lo anterior y en un trabajo conjunto con el Departamento Creativo, los genios de Estadísticas inventen el “salmón vegano”, que desove al ritmo del reggae y no sólo coma hierba, sino que también se la fume, en una demostración del espíritu liberal y moderno de esta Industria dominada por gerentes Opus Dei y Legionarios de Cristo.

Como ven, la Patria demanda algo más que una mísera Subsecretaría de Acui-(Salmoni)–Cultura. No podemos dejar pasar, así como así, lo mejor de lo nuestro y hay que saber sacarle brillo a las potencialidades que tenemos.




No por nada, somos el país con más enfermedades mentales en el mundo. Y a eso hay que sacarle provecho, partiendo por esto: una Subsecretaría para administrar el desquicio que navega por los canales y fiordos de la Patagonia Chilena.

Héctor Kol
Patagonia Chilena… Sin represas…Sin salmoneras,
Septiembre del 2011.