miércoles, 11 de junio de 2014

HIDROAYSÉN ERA EL SÍNTOMA...


 HIDROAYSÉN ERA EL SÍNTOMA…

Por Héctor Kol
Sinrepresassinsalmoneras.blogspot.com
11 de junio de 2014.

Exactamente 3 años atrás, la naciente COORDINADORA PATAGONIA SIN REPRESAS de la  X Región de Los Lagos iniciaba oficialmente su trabajo contra la construcción de las represas de Hidroaysén.

En el Teatro Diego Rivera de Puerto Montt, acompañados de grupos rock, punk y hip-hop, proclamábamos nuestra voluntad de estar, con nuestros símbolos y lienzos escritos con letra metalera, afiches, panfletos y engrudo, con nuestras chapitas prendidas en la ropa, siempre presentes en las calles y esquinas de Puerto Montt, recogiendo firmas e informando, para enfrentar a los depredadores como Misael Ruiz, Rabindranath Quinteros y René Alinco, que veían en HIDROAYSÉN la oportunidad de hacer “un negocito” o para que cada habitante de Aysén tuviera una pala para cavar el hoyo donde se enterraría el presente y el futuro de la Patagonia, a cambio del sueldo mínimo, claro…

Dijimos, en ese acto, que Hidroaysén era en esencia, un problema político, causado por una decisión política tomada en La Moneda y potenciada por la corrupción y el tráfico de influencias, las principales herramientas de trabajo con que opera el modelo económico de destrucción de la Naturaleza.

Dijimos que, dado que era un problema político, Hidroaysén debía resolverse políticamente… y así ocurrió ayer, 10 de Junio de 2014.

El Comité de Ministros del Gobierno que en su primera versión instaló a toda suerte de inescrupulosos en los servicios públicos de Aysén para que aprobaran ambientalmente el proyecto, a pesar de las evidencias que indicaban su carácter destructor, ahora revertía su inicial decisión política de darle luz a como diera lugar y costara lo que costara, pues lo mismo que se sabía cuando se violó la Ley para mantener a Hidroaysén a flote, es la fundamentación usada ayer para rechazarlo.

Lo único que cambió fue la decisión política respecto de él.

Así, tal como lo esperábamos desde que nos constituimos como Coordinadora y levantamos la consigna “HIDROAYSÉN ES EL SÍNTOMA…EL CAPITALISMO ES LA ENFERMEDAD”, hubo que provocar una derrota política para que el proyecto perdiera, de una buena vez, el respaldo inicial que la Concertación (en ese entonces, sin PC y sin Longueira) le había dado.

Siete años de duro batallar de muchos a cuyo esfuerzo y dedicación nos sumamos, sobreponiéndonos a la ira que causaba la propaganda enfermiza de HIDROAYSËN, con secadores de pelo apagándose por falta de electricidad, con estadios repletos de gente a oscuras, con ríos perdiéndose en el mar (¡!) y otras genialidades tan absurdas como las que ahora lanzan los ignorantes de siempre (“para reemplazar Hidroaysén hay que hacer 8 centrales termoeléctricas”…”ahora se viene la energía nuclear”) terminaron ayer, con el resultado esperado.

La lucha contra Hidroaysén fue un trabajo de educación popular, de abarcar todas las esferas del quehacer para detener al proyecto, una batalla informativa, de propaganda costosa y propaganda artesanal, de pleitos en Tribunales encabezados por la Fundación Pumalín, de resistencia a la represión, de cabalgatas y mateadas organizadas por Bagual, de trabajo voluntario de cientos de activistas como nosotros que convocaba Javiera, de coordinación para las funas, de aprender para enseñar, de conferencias y charlas dictadas por el Consejo de la Patagonia y ECOSISTEMAS, de mantener una vocería informada y contestataria, como Ginnia… Un trabajo político, planificado para vencer y no para ser simple testimonio o un derecho a pataleo más.

Un año antes de constituirnos como Coordinadora, FERNANDO SIEBALD, abogado de Pumalín, mi amigo, mi hermano, había encontrado la muerte en una ascensión al volcán Calbuco. Le hizo la vida imposible a Hidroaysén hasta el final de sus días y aún después de su muerte, ocurrida el 9 de junio de 2010, exactamente 4 años atrás, siguió inspirándonos para que su principal aspiración se viera cumplida. Quizás esté celebrando en el Cielo, como nosotros en la Tierra…

HIDROAYSÉN no es el final, ciertamente, de esta lucha política que es la lucha por la Naturaleza, sino su primera estación. La Ley de Pesca de Longueira, ahora apoyada por todas las organizaciones de “pescadores de bonos” , la Ley de Privatización del Borde Costero y la pronta batalla contra las mineras que terminaron de saquear GRATUITAMENTE el norte chileno y ahora acechan a la Patagonia, son las tareas que vienen en esta parte del mundo.

Y ojala en esa tarea, en ese batallar político que se avecina, esa Izquierda de Segunda División que tenemos, aferrada a las mismas consignas de fines del Siglo IXX, que sigue considerando al “tema ambiental” sólo una variable para las campañas eleccionarias que siempre pierde (a menos que se pase para el lado del enemigo, que siempre gana) y que aspira a derechos que no podrá ejercer porque no tendrá país donde ejercerlos, se atreva a educarse para comprender que no importa si el aserradero está en manos del Estado o en manos de Angelini si al Bosque lo cortan igual y que por encima de la aspiración a la re-distribución del Ingreso, está el resolver CÓMO SE OBTIENE ESE INGRESO.

En estas nuevas batallas que se avecinan, que ahora enfrentaremos con siete años más de experiencia, con siete años más de sabiduría y con esta victoria por emblema, por supuesto que recordaremos siempre que si bien HIDROAYSÉN era el Síntoma,  el Capitalismo SIGUE SIENDO la enfermedad…

Salud a los que luchan.

Héctor Kol
Patagonia Sin Represas… Sin Salmoneras

Junio 2014.